48 hours challenge‘: así se llama el reto viral que se está extendiendo de nuevo entre los adolescentes. Tuvimos conocimiento de él a finales del pasado año 2017 y parece que vuelve a propagarse actualmente. Consiste en desaparecer durante 48 horas y mantenerse escondido sin dar señales de vida absolutamente a nadie.
Como en otros retos o juegos de internet, existen distintas maneras de conseguir puntos y ser el mejor, en este caso, se obtienen más puntos cuanto más preocupados se muestren los familiares. Consiste en convencer al adolescente para que desaparezca de su casa, y de todo su entorno, al menos 48 horas, este tiene que conseguir que su fotografía sea difundida a través de las redes sociales y el ganador será aquel que más menciones o publicaciones consiga.
El objetivo final no es otro que aparecer en las publicaciones de Personas desaparecidas, tanto en Facebook como en otras redes. Este objetivo, tiene su motivación en la utilidad de las redes sociales cuando realmente desaparece una persona, todos colaboramos y nos volcamos para darle mayor difusión, siempre que sepamos que no es un bulo, y ponemos nuestro grano de arena para ayudar a las familias de personas o menores desaparecidos. En el caso de Facebook, son útiles el muro y las fotos, en los cuales compartimos las publicaciones de los familiares o incluso de la Policía o Guardia Civil. Esta práctica, lo único que persigue es dar mayor visibilidad y difusión posible para aumentar las posibilidades de encontrar al desaparecido, conducta de la que se aprovechan los creadores o participantes de este nuevo reto peligroso.
Este nuevo reto viral tiene preocupados, no solo a los padres, sino a las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, los cuales actualmente, están investigando el fenómeno con el fin de erradicarlo. Hasta el día de hoy, no se ha registrado ningún caso en España, pero la Policía Nacional ya está al tanto del regreso de esta nueva moda.
De nuevo, nos encontramos ante otra situación que nos indica la importancia que tienen las campañas de prevención y sensibilización, así como la concienciación ante el uso de las redes sociales y sus consecuencias. Los adolescentes son personas vulnerables que se encuentran en un mundo tecnológico rodeado de peligros que no son capaces de ver, y para ello, debemos estar los adultos, reforzando las conductas positivas ante el uso de internet y de las redes sociales. Si necesitáis ayuda, ¡contactad con nosotras!
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